
Para terminar esta serie de miniensayos sobre el fenómeno del amor en la existencia humana, es preciso hablar sobre este tema, constantemente y quizá como un problema especialmente lingüstico, sin embargo la monotemacia del amor se extiende y transforma los vínculos y relaciones que creamos.
¿A qué me refiero con monotemacia del amor? Bueno a este fenómeno interesante y peculiar de reducir la expresión del fenómeno amoroso a los vínculos eroticorromanticos de parejas.
Cuando incluso en parte de este fenómeno hay otros típos de vínculos y relaciones.
Una forma interesante de analizarlo es desde la concepción de los griegos.
La perspectiva de los griegos
Eros
El tipo de amor eros se refiere al amor apasionado que implica deseo y atracción. A diferencia del amor tal y como se entiende hoy día, eros ocupa una dimensión semántica más profunda. El eros griego a veces se trata solo de deseo o pasión.

Ludus
Amor lúdico que busca la aventura y la diversión y en el que la atracción física también juega un importante papel.

Philautia
Este es el amor que sentimos hacia nosotros mismos. Es la autoestima, alejada del narcisismo, y parte del pensamiento de que, para dar amor a otros, antes debemos querernos. Se trata de entenderse y cuidarse para sentirse bien con uno mismo.

Philia
Es el amor que se siente hacia un amigo, en forma de lealtad, cariño y camaradería. A diferencia del eros, no se guía por la pasión y no se vive con tanta intensidad. Sin embargo, está formado por un vínculo entre las dos personas.

Pragma
Este amor no tiene por qué nacer del amor romántico o pasional, sino de una visión realista de las relaciones. Son parejas que buscan metas y objetivos comunes en la vida, para mantener una relación duradera y tener un futuro juntos.

Storge
El amor Storge nace de relaciones más estrechas y comprometidas, como la amistad o los hermanos. De hecho, los griegos usaban esta palabra para hablar del amor entre miembros de la familia.

Agape
Es una mezcla del amor romántico con el amistoso. Su resultado es un amor puro y sincero, una relación en la que ceder no supone un problema. Las personas Ágape no tienen problemas con los celos y la posesividad, y siempre intentan mejorar en la relación, tanto a nivel emocional como sexual.

A esto me refiero con la monotemasia y ciertamente nos estamos limitando a algunas definiciones de los griegos puesto que el fenómeno puede analizarse y extenderse mucho mas allá de lo que presento.
No solo amamos a nuestra pareja

Una dimensión donde constantemente pasamos por alto como se construyen los vínculos es en el seno familiar, a pnuestros padres, hermanos, tios, primos, sobrinos, abuelos les dedicamos emociones y tenermos relaciones que dependen y se sustentan en la convivencia y cariño.
Y aunque muchas personas pueden rebatir esto diciendo qie su familia no cumpe la dinámica se ha demostrado el impacto negativo que los vínculos de la familia cercana o conflictos en su defecto pueden detonar, cambiando radicalmente y desarrollando diversos complejos, traumas, conflictos, etc. moldeando la personalidad de manera drástica.

Es curioso como funciona la soledad, para muchos puede ser relajante y para otros la peor tortura; y resulta natural en seres como nosotros, los humanos somos gregarios y requerimos socializar al igual que otras especies.
Uno de los vínculos que nacen de esta necesidad es la amistad y resulta ser incluso un vínculo a veces equiparable al que se tiene con la pareja o la familia.
Es una de las relaciones que como en la familiar el afecto no suele ser tácito ni claramente expresado.
Más perspectivas del amor
Meraki- amor experiencial:
Éste se refiere a un amor por las experiencias o actividades, por ejemplo: por hacer algún deporte, actividad recreativa, o el amor que sientes cada vez que vas a un concierto o a un festival de música.
Chōros- amor de arraigo:
Éste es el amor que sientes hacia tu hogar. Puede ser la necesidad y anhelo de volver a tu país o ciudad de origen.
Epithymia- amor pasional:
Es un amor basado 100 por ciento en la atracción sexual y el deseo infinito hacia alguien más.
Paixnidi- amor juguetón:
Con amor ‘juguetón’ hace referencia al proceso de coqueteo que integra muestras de afecto y cariño. Miradas coquetas, roces “accidentales”, sonrisas iluminadas y palabras electrizantes que cualquier persona puede disfrutar.
Mania- amor posesivo:
Cuando te aferras fuertemente a una persona. Un amor invadido de complejos, muchos celos dañinos, ansiedad e incluso manipulación y dominación.
Anákē- amor desventurado:
Es el tipo de amor en el que sientes que estás destinado a pasar toda tu vida con una persona, pero que las circunstancias de la vida o el destino se encargaron de separarlos, creando así un apego emocional solamente.
Koinōnía- amor momentáneo:
Se interpreta más como una conexión fugaz que tienes con otra persona. Puede durar unas horas o unos días, puede surgir por cualquier cosa, alguna conexión musical, una palabra o una idea, pero en ese momento se convierte en tu todo y después esa conexión desaparece.
Sébomai- amor reverencial:
Este tipo de amor sí va mucho más ligado con la religión y la ideología, pues aquí tienes un amor extremo por algún Ser Supremo.

Para concluir les recomiendo reflexionar sobre esto, sobre como el amor se extiende mucho más allá de las relaciones típicas y como el lenguaje determina la precencia y consciencia de este fenómeno.
El lenguaje es tan particular que puede transformar nuestra vida.
Y las formas en las que nos vinculamos no solo son variadas, dependiendo de con quien y como nos relacionesmos, sino tambien de las actividades y espectativas especiales de cada caso.
¿Para reflexionar… No?